Al hablar de protección solar, lo primero que se nos viene a la mente son las cortinas y persianas. Sin embargo, existe una propuesta mucho más innovadora que nos ofrece más funciones que las antes mencionadas; estamos hablando del toldo vertical.

Se puede pensar en los toldos verticales como una combinación perfecta entre las funciones de un toldo común con la simplicidad de una cortina o persiana, obteniendo las mejores características de cada elemento en un solo producto.

Además, la simpleza en el diseño de los toldos verticales aporta un excelente acabado estético en apartamentos, oficinas y edificios, muy característico del diseño minimalista que está tan de moda, por eso es muy común observar este tipo de toldos en Madrid.

Tipos de toldos verticales

Existen en la actualidad muchos tipos de toldos verticales, entre los cuales podemos mencionar los siguientes.

Toldos cortavientos

Son los toldos más comunes en Madrid. Este tipo de toldos posee guías laterales de aluminio que impiden que se muevan o deformen con el viento, mayormente se colocan en terrazas, jardines y cenadores.

Toldos MaxiScreen

Se trata de un toldo vertical con un diseño bastante moderno y estético. Este tipo de toldos cuenta con un sistema de guías (varillas de acero inoxidable), las cuales permiten que se encuentre siempre sujeto.

Además, si deseas alargar la vida útil del tejido, puedes incorporar un sistema semicofre que protegerá la lona.

Toldos estor o Vertical-Box

Instalados generalmente en barandillas y balcones con techo, aseguran la protección solar y resisten vientos moderados.

Toldos Bip Screen

Toldos verticales perfectos para porches y ventanales. Similar a los toldos MaxiScreen, los toldos Bip Screen cuentan con un sistema de guías que garantiza la ejecución de los movimientos de subida y bajada sin que ocurra un desplazamiento vertical. Esto es bastante útil en casos de vientos de intensidad moderada.

Ventajas de los toldos verticales

Desde su simplicidad, hasta el poder disfrutar completamente de la luz solar sin que el calor de la misma te afecte, son muchas las ventajas de los toldos verticales.

Personalizables con cualquier tipo de tela

Los toldos verticales, elaborados con materiales de gran calidad, se adaptan a diferentes espacios. Puedes utilizarlos como una especie de toldo de cortina para ventanas pequeñas, o para cubrir cerramientos y porches.

La variedad de telas con las que se fabrican permiten combinar la paleta de colores y las texturas de tu preferencia, logrando así añadir un toque personalizado a cualquier espacio.

Fáciles de manejar

La simplicidad de los toldos verticales no se centra solo en su diseño, sino también en su instalación y manejo. Si lo deseas, puedes añadir a tu toldo un sistema de enrollado, que te permitirá extenderlo o guardarlo cuando quieras.

Existen dos tipos de toldos verticales enrollables, los motorizados, que activan el sistema automáticamente por control remoto o sensores de sol y lluvia; y los toldos manuales, manejables a través de manillas o cuerdas.

Más duraderos

Es muy común encontrar listones rotos en las persianas tradicionales después de poco tiempo de uso, pero esto no pasa en los toldos verticales, ya que son básicamente una tela lisa, resistente a los vientos y también al sol, por lo que tampoco pierden el color.

Puedes cubrir grandes fachadas

Los toldos verticales se encuentran en gran variedad de tamaños, y son elaborados con diferentes materiales que los hacen resistentes al sol, la lluvia y los vientos, en intensidades variables.

Al adquirir un toldo vertical es mejor consultar con profesionales que te puedan orientar entre los mejores modelos y materiales disponibles, así podrás conseguir un toldo que realmente se adapte a tus necesidades.